Hambre, transferencias monetarias y nuestra respuesta de emergencia al terremoto de Haití de 2021
l 14 de agosto de 2021, un fatal terremoto de 7,2 grados sacudió Haití, afectando a 800,000 personas, entre ellas 340,000 niños, niñas y adolescentes, y destruyendo 137,585 casas. Un año después, el país sigue en estado calamitoso. Actualmente, Haití atraviesa una importante crisis económica, con una inflación del 26%, que dificulta a las familias el acceso a los alimentos y otros productos básicos, o la venta de las cosechas en los mercados locales. Como resultado, se estima que 4,5 millones de personas sufren inseguridad alimentaria que es el 40% de la población.
En el terremoto, las familias perdieron sus casas, sus medios de vida e incluso a sus familiares, lo que agravó la ya de por sí precaria situación del país, causada por la inestabilidad económica y política. Como resultado, las familias han tenido muchas dificultades para recuperarse.
En respuesta al terremoto, Save the Children puso en marcha una respuesta multisectorial para atender las necesidades urgentes en las zonas más afectadas. Distribuyeron transferencias monetarias multi-propósito a 1,000 familias para llegar a más de 2,000 niños, niñas y adolescentes. Las transferencias monetarias han permitido a familias como la de Ginette o Edlene cubrir sus necesidades urgentes para ellos y para sus hijos.
La historia de la familia de Ginette
Ginette vive con su hija Christelle, de 5 años, su hija Loisa, de 18 meses, su hijo Wood, de 12 años y con la abuela, en la zona de Les Cayes, en Haití. El terremoto dejó a la familia sin hogar, por lo que Ginette primero se refugió con su familia en una escuela local y luego construyó una casa con las posesiones que le quedaban.
Viven en las montañas, donde el acceso es difícil. Tras el terremoto, algunas carreteras quedaron bloqueadas debido a los deslizamientos de tierra, por lo que apenas han tenido acceso a los servicios básicos, al agua o a la electricidad. La vida es difícil y consiguen sobrevivir día a día porque sus amigos y familiares comparten la comida con ellos. Ginette nos cuenta:
"Antes del terremoto, teníamos un pequeño negocio. No teníamos grandes recursos, pero con los cultivos que teníamos, encontrábamos comida para comer en los campos y también comprábamos otros alimentos. Solíamos comer dos veces al día: ñame, plátano, maíz y todo tipo de alimentos".
"Solíamos cultivar fríjoles, maíz, plátano, ñame, yuca... y todo lo que encontrábamos. Aunque la gente comprara y no pagara realmente, nos las arreglábamos para vender algo. Pero el terremoto destruyó los cultivos, todo y no dejó nada. Así que aceptamos nuestro destino y continuamos la vida".
Save the Children apoyó a la familia de Ginette con tres transferencias monetarias multi-propósito, la última en abril de 2022. Con eso pudo comprar herramientas para reconstruir su casa destruida, pagar las matrículas escolares para que sus hijos pudieran ir a la escuela y comida. Ella continúa:
"Cuando Save the Children nos dio las transferencias monetarias, fue una bendición para nosotros. Tuve suficiente dinero para pagar las matrículas escolares, para comer, para comprar alfombras y chapas para construir una casa en la que vivir... porque vivíamos en la calle. La situación de los niños mejoró, porque pudieron comer y beber y no sufrieron durante esos tiempos".
La historia de la familia de Edlène
Entha, de 7 años, vive con sus dos hermanos y su madre Edlène en las montañas del suroeste de Haití. Durante el terremoto, el pueblo donde viven también quedó completamente destruido y su familia perdió todas sus cosechas y pertenencias. Edlène, que tenía una pequeña tienda, perdió todos los bienes de su negocio. La familia no pudo obtener ingresos, por lo que empezó a enfrentarse a otros problemas, como el hambre. Edlène nos cuenta:
"El terremoto me quitó todo. El negocio que tenía se derrumbó y no tenía dinero para comprar más productos".
"Fue duro porque no tenía nada. Y desde que ocurrió esto, no pude comprar ningún bien porque no tenía medios. Nada funciona. Los clientes compran a crédito, y no soy capaz de encontrar dinero para comprar más. Ya no tengo medios para hacerlo. Así que ya no hago nada (como antes)".
"El terremoto también destruyó todos nuestros campos de cultivo. No pudimos salvar nada. Las carreteras quedaron destruidas. Fue muy duro".
Apoyamos a Entha y a su familia, del mismo modo que apoyamos a la de Ginette. Proporcionamos a la familia tres transferencias monetarias multi-propósitos, la última en abril de 2022. Su madre, Edlène, pudo comprar herramientas para reconstruir su casa destruida, pagar las matrículas para que los niños puedan ir a la escuela y comida. También recibieron un kit de higiene.
En coordinación con los líderes de la comunidad, estamos gestionando un Espacio Amigable para los Niños, Niñas y Adolescentes, equipado con juguetes y material didáctico. Aquí, niños, niñas y adolescentes como Entha y sus hermanos pueden recibir apoyo psicosocial, para que puedan recuperarse del trauma del terremoto, sentirse mejor y más seguros de sí mismos. También proporcionamos comidas a los niños, niñas y adolescentes de esta zona.
"Save the Children ayudó a mi madre y a mi padre. Save the Children hizo transferencias monetarias y mi madre compró chapas y madera para reconstruir la casa. Save the Children también envió transferencias monetarias a mi madre, así que pudo comprar comida. La comida me hizo feliz", dijo Entha.
Si quieres apoyar a los niños, niñas y adolescentes de Haití, haz una donación a nuestro Fondo de Emergencia para la Infancia hoy mismo. Este dinero nos permite responder rápidamente y ayudar a los niños, niñas y adolescentes a sobrevivir a emergencias como el terremoto de Haití.
También puede obtener más información sobre nuestra respuesta en Haití.