COVID-19: Los niños y niñas más excluidos serán los más afectados por el cierre de escuelas en todo el mundo
Los gobiernos y las comunidades deben actuar ahora para garantizar que millones de niños y niñas excluidos no pierdan su educación por el cierre de las escuelas para tratar de contener el brote de coronavirus, advierte Save the Children.
Según UNESCO, más de 120 países ya han cerrado escuelas y universidades afectando a casi tres cuartas partes de la población estudiantil mundial, aproximadamente 1.200 millones de estudiantes. Se espera que ese número aumente a medida que el Coronavirus se expanda.
Save the Children hace un llamado a los gobiernos para que garanticen con urgencia la atención adecuada a niños y niñas, así como también la implementación del aprendizaje remoto inclusivo, reconociendo que el cierre de escuelas afectará más a los niños y niñas más excluidos. También es vital que los gobiernos apoyen a los docentes y los capaciten para proporcionar una enseñanza a distancia de calidad.
El impacto del cierre de las escuelas se extiende más allá de la interrupción de la educación: también conllevan otros riesgos para los niños y niñas excluidos y de hogares con bajos ingresos, porque muchos de ellos dependen de la alimentación que reciben en la escuela para su nutrición diaria.
Gabriella Waaijman, Directora Humanitaria global Save the Children, dijo:
“Nos enfrentamos a una situación sin precedentes. El número de niños y niñas que abandonan repentinamente la escuela o la universidad es equivalente a toda la población de la India. Cientos de millones de estudiantes no podrán volver a clases normales durante meses, posiblemente más, con muchos exámenes importantes pospuestos o cancelados por completo".
"Sabemos por experiencia que cuanto más tiempo los niños y niñas estén fuera de la escuela, es más probable que no regresen, especialmente cuando provienen de hogares con bajos ingresos o cuando son niñas. Es por eso que los gobiernos deben implementar herramientas de aprendizaje a distancia fáciles de usar, asegurando que las tecnologías utilizadas no excluyan a los niños y niñas pobres o con discapacidad. Necesitamos ser creativos. Por ejemplo, en comunidades con poco o ningún acceso a Internet, los programas de radio pueden permitir que los niños y niñas continúen aprendiendo”.
“Ahora es momento de que el mundo se una para proteger a los niños y niñas más vulnerables, que serán los más afectados por esta crisis global. Estos incluyen niños y niñas sin hogar o los que viven sin sus padres o cuidadores. Los niños y niñas discapacitados pueden quedar aún más aislados o descuidados si no pueden ir a la escuela, mientras que los niños y niñas refugiados y desplazados en campamentos temporales son aún más vulnerables que antes de esta crisis".
A medida que aumentan las presiones sobre las familias de bajos ingresos, los niños y niñas saldrán a trabajar para aumentar los ingresos familiares, y especialmente las niñas pueden enfrentar la carga de cuidar a los miembros de la familia que contraen el virus o cuidar a otros niños y niñas más pequeños. Si los planes no se implementan con urgencia, algunos niños y niñas corren el riesgo de no volver a la escuela en absoluto".