El mundo debe de cambiar para las niñas y adolescentes trabajadoras: queremos estudiar y tener una vida digna para nuestras familias
Thalia, es una adolescente peruana de 16 años. Desde pequeña aprendió el valor del trabajo digno y gracias a este ha podido apoyar a su familia, pagar sus estudios y aspira a estudiar en la universidad. Ella es integrante del Movimiento Latinoamericano y del Caribe de Niños, niñas y Adolescentes Trabajadores (MOLACNATS). Hace 3 años viene participando en espacios de incidencia política cómo por ejemplo los presupuestos participativos de su comunidad, pero este año dio un gran salto al llevar la voz de las niñas de la región a la Comisión sobre el Estatus de la Mujer de las Naciones Unidas (CSW65).
Durante la CSW65, Thalia participó en la sesión “CSW65: Círculo de Conversación de Niñas”, organizada por El Grupo de Trabajo sobre Niñas y ONU Mujeres, junto a más de 100 niñas y adolescentes de todo el mundo. El objetivo de este círculo de diálogo fue amplificar las voces de las niñas e incrementar su visibilidad en el foro Generación Igualdad, garantizando su liderazgo y participación en los procesos políticos a nivel local, nacional y global.
Durante la sesión, Thalia enfatizó en que los Estados deben proteger los derechos de las niñas y adolescentes trabajadoras y brindarles espacios de participación, que se debe priorizar la seguridad de niñas y adolescentes en sus casas y en espacios públicos. Finalmente señaló que se debe incrementar la inversión pública en la educación de niñas y adolescentes.
Thalia también pudo alzar la voz en el evento de alto nivel "Más allá de la pandemia en la sombra: prevención y respuesta a los riesgos y experiencias de violencia de género de las adolescentes”, organizado por Save the Children y la Comisión de Mujeres Refugiadas. En su intervención habló sobre el impacto que ha tenido la pandemia en la vida de las niñas y adolescentes: violencia doméstica, laboral y en el espacio público; uniones tempranas; barreras para acceder a servicios públicos como salud sexual y reproductiva; dificultad para estudiar por la falta de internet y equipos tecnológicos.
Thalia es una adolescente que no solo está consciente de los problemas que afectan a las niñas y adolescentes, sino también propone soluciones desde su perspectiva como niña trabajadora. “En la recuperación de la economía se debe garantizar el trabajo digno para niños, niñas y adolescentes, para no sufrir acoso y explotación y que el pago sea justo sin hacer diferencias por ser niñas y mujeres. En el tema de educación, se debe garantizar el acceso a internet y una educación sexual integral con enfoque de género en las escuelas”, propuso.
Thalia se mostró muy orgullosa y feliz de participar representando la voz de las niñas en ambos espacios. “Creo que es importante que las niñas participemos, para que las personas adultas y autoridades puedan escucharnos y conozcan la realidad desde el punto de vista de la niñez trabajadora. Si buscan nuestro bien, tienen que tomarnos en cuenta.”, expresó.
“Me parece importante la participación que han tenido las niñas de todo el mundo durante el evento [la Comisión sobre el Estatus de la Mujer]. Quiero agradecer a las organizaciones porque el evento ha sido muy fructífero, ya que ha recogido la experiencia de muchas niñas y me llevo como lección que la participación infantil debe continuar”.