Los niños, niñas y adolescentes en América Latina y el Caribe se ven obligados a migrar debido a causas estructurales como factores relacionados al cambio climático, la violencia, la falta de oportunidades educativas y económicas, y la búsqueda de reunificación familiar. En el camino, están expuestos a muchos riesgos, incluido el abuso, ser utilizados para transportar drogas, convertirse en víctimas de homicidios, caer en redes de trata de personas, sufrir accidentes y pasar muchas horas sin comida ni agua.
En este momento, la región atraviesa por dos crisis migratorias. La crisis migratoria en el Norte de Centroamérica hacia los Estados Unidos y la crisis migratoria venezolana. Esta crisis migratoria se ha vuelto mucho más severa debido a las políticas anti migratorias y los casos de detención o retorno en Estados Unidos. Los niños, niñas y sus familias huyen de sus países de origen debido a desastres relacionados con el cambio climático o degradación ambiental severa, shocks económicos, violencia, reunificación familiar (especialmente en el norte de Centroamérica) y/o factores políticos.
Save the Children en América Latina y el Caribe trabaja en la región para mitigar las causas que impulsan a los niños y niñas a abandonar sus comunidades de origen y proporcionarles herramientas apropiadas a nivel local para mejorar su calidad de vida y generar sus propios medios de vida. Al mismo tiempo, respondemos de manera temprana para proporcionar ayuda y cubrir las necesidades básicas de los niños y niñas más vulnerables. Además, buscamos influir en las autoridades nacionales y regionales para garantizar los derechos de la niñez migrante en sus países de origen, tránsito y destino.
Nuestra respuesta a la crisis migratoria venezolana está dirigida a migrantes venezolanos y poblaciones de acogida en Colombia, Perú y Venezuela. Proporcionamos transferencias de efectivo a las familias más vulnerables en las regiones fronterizas y apoyamos la compra de alimentos y otros artículos esenciales. Estamos implementando espacios amigables para los niños y niñas en las fronteras de Perú y Colombia para proporcionar apoyo psicosocial que permita que los niños y niñas jueguen y aprendan. Además, estamos proporcionando kits escolares y hemos implementado nuestro programa de educación en emergencias para que los niños y niñas continúen aprendiendo durante el tránsito y destino.
En Colombia, hemos inaugurado una clínica de salud sexual y reproductiva que brinda atención médica a sobrevivientes de violencia sexual, mujeres embarazadas y otras personas que han cruzado la frontera buscando ayuda. Además, estamos distribuyendo filtros de agua y kits de higiene con artículos esenciales que ayudan a mantener a los niños y niñas saludables.
Nuestra oficina de país en Venezuela implementa programas de respuesta humanitaria y proyectos que incluyen protección infantil, educación, salud, seguridad alimentaria, WASH y actividades de incidencia. Actualmente, estamos trabajando con 7 socios locales, fortaleciendo sus capacidades y asegurando apoyo nutricional y psicosocial a los niños y niñas más vulnerables y sus familias. También estamos impulsando esfuerzos de incidencia dentro y fuera de Venezuela para proteger los derechos de los niños y niñas en tránsito y los que se han quedado atrás.
Trabajamos para mitigar los riesgos de la migración insegura y mejorar la calidad de vida de los niños, niñas y sus familias invirtiendo en oportunidades de desarrollo, así como en educación, protección y salud, en los países de origen, tránsito y retorno. Estamos implementando una cultura de paz en las escuelas y fortaleciendo las capacidades de los estudiantes, padres y maestros para hacer que las escuelas estén libres de violencia y sean un espacio seguro en México, Guatemala y Honduras.
Estamos trabajando para defender a las mujeres y jóvenes en riesgo o víctimas de la trata de personas en Costa Rica, Nicaragua, Honduras, El Salvador, Guatemala y República Dominicana. Estamos protegiendo a los niños y niñas desplazados internos al mejorar los sistemas de protección para los niños y niñas que han sido desplazados y / o retornados a sus países después de la migración en El Salvador y Honduras.
Estamos mejorando los sistemas de protección infantil fortaleciendo los sistemas de protección locales y transfronterizos e incorporando servicios de calidad para niños y niñas en el norte de Centroamérica y México. Además, brindamos servicios de salud sexual y reproductiva a adolescentes que regresan a El Salvador y Guatemala.